Padre celestial, quiero darte gracias por todas las bendiciones que me has dado durante este año que se acaba. Has estado conmigo en las buenas y en las malas y nunca me has dejado sola. Me siento agradecida por tu amor incondicional y por tu guía constante en mi vida. Te pido que me concedas la gracia de comenzar este nuevo año con renovado espíritu y un corazón agradecido, y que me ayudes a seguir siendo fiel a ti y a tus enseñanzas. Te doy gracias por tu presencia constante en mi vida y te pido que sigas bendiciéndome y protegiéndome en el año que viene. Amén.